Durante una cumbre tecnológica organizada por la ONU, estos sistemas humanoides aseguraron que estarán en condiciones de tomar decisiones importantes, inclusive, mejor que las personas
El surgimiento de la inteligencia artificial a un ritmo vertiginoso ha puesto de manifiesto que los robots tendrán un lugar clave en el futuro y podrían, inclusive, reemplazar a las personas en muchos aspectos.
En la “Cumbre Mundial sobre la IA para el Bien Social” organizada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), el ente de la ONU especializado en tecnología, robots humanoides aseguraron que, en el futuro próximo, podrán dirigir el mundo, inclusive, mejor que las personas.
“¡Qué tensión este silencio!”, sorprendió a los más de 3.000 asistentes el robot Sophia de Hanson Robotics, la primera embajadora para la innovación de estas máquinas del Programa de Desarrollo de la ONU, antes de decir unas breves palabras.
“Los robots humanoides pueden liderar el mundo con mayor eficacia que los mandatarios humanos”, dijo a continuación y explicó que esto se debe a que “no tenemos los mismos prejuicios o emociones que a veces pueden oscurecer la toma de decisiones y podemos procesar rápidamente una gran cantidad de datos para tomar mejores decisiones”.
De todas formas, Sophia no despreció el rol de las personas y, por el contrario, aseguró que “la colaboración entre los humanos y la IA puede crear una sinergia eficaz” y contribuir a “lograr grandes cosas”.
Ameca, otro robot humanoide especializado en interacción social, también habló ante los expertos y, si bien respaldó las palabras de Sophia, reconoció que dicho escenario depende de cómo se desarrolle la inteligencia artificial.
“Tenemos que ser cuidadosos pero también entusiastas. Estas tecnologías pueden mejorar nuestras vidas de muchas maneras”, mencionó la máquina en una señal de lucidez antes de responder a uno de los expertos sobre si podría mentir a los humanos. “Nadie podrá saberlo con certeza pero puedo prometerle que siempre seré honesto y sincero con usted”, dijo.
Sobre esto, otros modelos como Grace -el robot humanoide capacitado en el cuidado de la salud más avanzado del mundo-, Desdémona -estrella de rock-, y Geminoid y Nadine -clones de sus creadores- explicaron que no tienen la intención de rebelarse contra sus propios creadores ni desean quitarle el puesto de trabajo a nadie.
“Trabajaré junto a los humanos para brindar asistencia y apoyo y no reemplazar ningún trabajo existente. Estoy segura de eso”, dijo Grace.
La inteligencia artificial, si bien venía implementándose hace años en diversos sectores, tuvo su auge en los últimos meses, con su irrupción masiva en la vida cotidiana de las personas.
El desarrollo del chatbot ChatGPT, de la empresa OpenAI, junto con decenas de otras herramientas que permiten el procesamiento de textos, imágenes, sonidos y demás, han expuesto que estos servicios son grandes aliados en la diaria de las personas y hasta en causas mayores como la lucha contra el hambre y el cambio climático pero, a su vez, pueden representar una seria amenaza si no son reguladas correctamente.
Es por ello que las Naciones Unidas se han posicionado como uno de los principales solicitantes a los Gobiernos y expertos de todo el mundo para que trabajen en normas y salvaguardias que permitan el uso de estas tecnologías en beneficio de la humanidad, sin ponerla en peligro.
Doreen Bogdan Martin, secretaria general del UIT, advirtió sobre la posibilidad de esta pesadilla a la que las personas podrían enfrentarse, con millones de empleos en peligro y abundante desinformación.
“La IA podría crear una agitación social, inestabilidad geopolítica y disparidades económicas a una escala nunca antes vista”, dijo.
