De ayudante de establo a jinete
Brooklyn Hayes era un ayudante de establo y cumplió su sueño al convertirse en jinete sustituto. Al saber la noticia de que participaría en una carrera, preparó su cuerpo y mente para la competencia que sucedería en el Hipódromo Belmont en Nueva York.
Su montura se llamaba Sweet Kiss y ambos ganaron a Gimme, el favorito de los aficionados; pero la sorpresa fue mayor cuando Hayes cayó de su caballo al cruzar la línea de llegada. El médico que atendía la pista, John A. Voorhees, examinó el cuerpo y diagnosticó que el hombre había sufrido un paro cardíaco.
Tal suceso terminó otorgándole a Hayes, el Récord Mundial de Guiness de haber ganado una carrera estando fallecido.
Causas de la muerte y el destino del caballo
Sweet Kiss se ganó la mala fama de traer mala suerte a su jinete y comenzó a ser conocido por el apodo de Sweet Kiss of Death, o «dulce beso de la muerte«, el animal ganó un total de 1775 dólares en premios y se retiró del mundo de las competencias.
Sin embargo, han pasado más de 95 años y todavía no se tiene claro que pasó con Hayes: unos dicen que fue la emoción del momento lo que ocasionó un infarto fulminante. Otros mencionan que la presión a la que se vio sometido el jinete para rebajar de peso lo llevaron al límite: «Tuvo la dura tarea de bajar 4,5 kg en 24 horas, estuvo varias horas en la calle trotando para bajar el peso excedente.”
“Se esforzó, transpiró, no bebió agua y cuando se subió a la montura para dar comienzo a la carrera, estaba débil y cansado», fueron uno de los últimos diagnósticos que se tuvo del jinete. A la semana siguiente, Hayes fue enterrado llevando la misma vestimenta en su primer y último triunfo.
Cortesía de Monita
