La pandemia del Covid-19 ha traído consigo una crisis económica que ha afectado a muchas familias mexicanas y para Ángel Gabriel Zapata las cosas se pusieron peor al ver deteriorada la prótesis con la que día a día sale a trabajar. Ángel, de 34 años, es originario de Jalisco pero vive en la Ciudad de México y se gana la vida repartiendo comida en bicicleta a través de la plataforma "Uber Eats", pese a que su pierna tuvo que ser amputada por un brutal ataque que sufrió en 2003.
En entrevista con , el recuerda ese día: pasó por el lugar equivocado a la hora equivocada, pues fue apuñalado por desconocidos que sostenían una riña en calles de Toluca. Tras la agresión, sufrió varias complicaciones, pues el nervio ciático de su pierna derecha se vio comprometido, además de que la piel de esa zona comenzaba a ser más susceptible a todo tipo de infecciones y lesiones que cada vez eran más difíciles de tratar. Por eso, en 2006 los doctores decidieron retirarle la extremidad. Tras varios años utilizando la prótesis, esta ha dejado de funcionar y poco a poco, las piezas que la conforman se han ido dañando, lo que significó un duro golpe para su empleo.
El mal estado de dicho soporte para su cuerpo ha limitado su trabajo y por lo tanto, también sus ingresos. Ángel relata que antes de que se le rompiera, podía subirse a su bicicleta para trabajar y pedaleaba aproximadamente unas 10 horas al día, pero ahora, con algunas reparaciones caseras y temporales que le ha hecho, no aguanta jornadas de más de 6 horas. "Liner" es el nombre de la pieza que necesita ser reemplazada y su costo ronda los 9 mil pesos,
sin embargo, su situación actual le impide juntar dicha cantidad, pues además de tener menos ingresos por la pandemia, el regreso a clases presenciales representará un gasto fuerte ya que tiene una hija de 5 años que recién entrará a la escuela. Ante la preocupante situación, sus compañeros de Uber Eats y otras plataformas no dudaron en apoyarlo y se han organizado para hacer rifas y así, poder juntar lo necesario para comprar el "liner". Hasta el momento solo han podido conseguir que un tatuador rife un trabajo de 15 centímetros, con un costo de 100 pesos el boleto, dinero que será destinado a la causa.
Es por eso que para continuar con las rifas y tener más artículos para ello, Zapata solicita donaciones y así alcanzar el monto necesario para reparar la pieza que necesita para volver a hacer sus actividades de manera normal. Para ello, facilitó a nuestros lectores dos números de contacto para quienes estén interesados en comprar boletos para las rifas o para quienes quieran apoyarlo: 5585515576 y 5612670056
