Los medios informativos posicionaron a Steven Hawking como “la mente más brillante de los últimos tiempos”. Inclusive se afirma que llegó a sobrepasar al legendario Einstein. Por otro lado, hay quienes afirman que se trató de un personaje desinformador y que hasta podría haber sido un robot androide, o una persona enferma que no se podía mover y que era usado para manipular la opinión pública, por parte de ciertos grupos de poder mundial, con el objetivo de desviar a la humanidad de las verdades de universo. Aun con todo, el científico que permanecía inmóvil en una silla de ruedas, debido a una enfermedad degenerativa, teniendo que comunicarse con una voz robótica, aparte de sus teorías sobre Astrofísica, antes de morir dejó unas predicciones escalofriantes. En esta oportunidad traemos: “Las profecías de Stephen Hawking”:
Este científico es uno de los promotores de la “Teoría de la evolución de las especies”, misma que propone que el ser humano ha ido evolucionando de reino en reino de la naturaleza, empezando por una bacteria, un pececillo, un reptil, un simio y finalmente lo que somos ahora. Sin embargo, grandes autores e investigadores han demostrado que no es tal. Pero desde esa perspectiva, Hawking pronostica que la evolución del hombre es indirectamente proporcional a la de las máquinas; de ese modo, mientras el humano ha durado supuestamente cientos de miles de años en evolucionar, la inteligencia artificial lo está haciendo a pasos agigantados y llegará el punto en que las personas queden obsoletas y reinen las máquinas. Muy al estilo de “Animatrix”. “Me temo que esta tecnología puede reemplazar a los humanos por completo. Si las personas diseñan virus informáticos, alguien diseñará inteligencia artificial que se replique a sí misma. Esta será una nueva forma de vida que superará a los humanos (…) tomará el control de sí misma y se irá rediseñado a un ritmo que los humanos no podrán competir”, especificó.
Una sangrienta invasión extraterrestre
Siempre manifestó que estaba plenamente convencido de que los extraterrestres existen, pero no como seres superiores dispuestos a ayudarnos, sino que al contrario, como terribles conquistadores intergalácticos, empeñados en acabar con la raza humana de este planeta y adueñarse de todo. «Si los alienígenas nos visitaran, el resultado sería parecido a cuando Colón arribó a América, que no fue muy bueno para los nativos americanos…», añadió el científico.
Un nuevo orden mundial
Steven Hawkin lo dijo literalmente: que se instauraría un nuevo orden internacional, donde ya no existirán naciones, sino un solo gobierno único y de ese modo, se impedirán las guerras. Éste es uno de los factores por los cuales ha sido muy criticado, porque el mencionado nuevo orden mundial se ha acusado como todo un plan macabro contra la humanidad, fraguado desde hace siglos.
Un virus mortal acabará con más de la mitad de la población
Steven aseguró que las armas biológicas son peores que las nucleares, puesto que para la fabricación de las bombas atómicas se requieren instalaciones de grandes magnitudes, mientras que desde una habitación remota donde opere un laboratorio sofisticado, se pueden fabricar virus y pandemias que, al expandirse, acabarían con la vida de millones de individuos. Calificó los experimentos con la genética como altamente peligrosos y exhortó a detenerlos.
El hombre conquistará otros mundos
Antes de morir en 2018, reafirmó que gracias a todos los avances en materia espacial, colonizar planetas ya no forma parte de la ficción, sino que incluso, si el ser humano quiere salvarse de la extinción que le viene a este planeta, deberá ir en búsqueda de otros astros.
La Tierra arderá en llamas
En esta acalorada profecía, el profesor Hawkin augura que nuestro planeta aumentará drásticamente su temperatura y se volverá muy similar a Venus, con cerca de 250 grados centígrados y continuas lluvias sulfurosas. Dijo que sólo era cuestión de cinco siglos para llegar a esa realidad.
La superpoblación será caótica
Stephen era uno de los ponentes de la teoría de la sobrepoblación, misma que ha sido señalada como un plan eugenésico. Profetizó que en menos de 100 años, la cantidad de seres humanos será la principal causa de hambrunas inimaginables, así como toda clase de desórdenes sociales, epidemias y destrucción en general. Según sus cálculos, el número de personas en el planeta se ha ido duplicando cada cuatro décadas.
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