¿El dinero puede comprar la felicidad? Aquí vamos, esto es algo que tiene el potencial para generar un apasionado debate. Para bien o para mal, el dinero puede generar un importante aporte a su bienestar físico y mental. A lo mejor, y frecuentemente, sacrificas de manera voluntaria tu tiempo a cambio de dinero extra, con el objetivo de que en otro momento disfrutar o tener más tiempo libre, pues déjame decirte que no estás solo; un nuevo gigante estudio encontró que cuanto más dinero ganes, más feliz eres.
Una investigación anterior ha propuesto que el bienestar experimentado no aumenta por encima de los ingresos de 75.000 dólares anuales, es decir, la felicidad se estancaría a esa cantidad. Los recientes hallazgos refutan el estudio anterior, que encontró que la felicidad se estanca una vez que una persona gana $75,000 por año. Según el autor, es porque «se basa en un conjunto de datos con una medida de bienestar experimentado que puede o no ser indicativa de la experiencia emocional real (informes retrospectivos y dicotómicos)».
Para la investigación inicial, los investigadores utilizaron encuestas para preguntar a las personas cómo recuerdan haberse sentido durante algún período del pasado, como el último día, semana o mes. Sin embargo, «esto requiere que las personas recuerden con precisión cómo se sintieron en los diversos momentos del pasado y luego integren con precisión esos recuerdos en una sola estimación, un enfoque que es vulnerable a errores de memoria y sesgos en el juicio», escribió el autor Matthew A. Killingsworth.
Para este estudio se buscó corregir esos detalles, recopilando informes en tiempo real sobre el bienestar experimentado y luego examinar su relación con los ingresos familiares. A partir de 1.725.994 informes de muestreo de experiencias de 33.391 adultos estadounidenses con empleo, los científicos encontraron que tanto el bienestar experimentado (sobre cómo se siente en este momento) como el evaluativo (satisfacción con la vida) aumentan linealmente con el logaritmo (ingresos), con una pendiente igual de pronunciada para los que tienen mayores ingresos que para los que tienen menores.
Como se muestra en la gráfica, los mayores ingresos se asociaron sólidamente tanto con un mayor bienestar experimentado como con un mayor bienestar evaluativo. También podemos observar que la correlación no se detiene en los 75.000 dólares.
La ciencia muestra interés en conocer cómo el dinero puede relacionarse con nuestra felicidad. Para esta ocasión, se muestra que existe un fuerte vínculo entre los ingresos, la satisfacción con la vida y el bienestar emocional. Pero eso no significa que únicamente tengas que aferrarte a ganar más dinero para ser feliz; mantener una buena relación con tu familia y amigos, además de descubrir lo que quieres lograr en la vida, puede ayudarte a cultivar la alegría y finalmente conducirte a una vida más feliz.
Los hallazgos se publicaron recientemente en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.